El ‘Decano’ superó sus contratiempos y le puso alma vida y corazón. El uno a cero fue suficiente para una noche que quedará en el recuerdo.
El inicio del partido parecía augurar un gran arranque para el dueño de casa que sintió el aliento de su gente. Apenas cuatro minutos de juego, y un balón fue tomado por Cristhian Cordero que probó de media distancia y su ejecución se fue apenas desviada.
El partido parecía entrar en imprecisiones ya que ambos no lograban concretar jugadas hasta que apareció una acción de Atlético Tucumán que dejó frío a más de uno. A los trece minutos, centro desde la derecha para Barbona que no logró pegarle bien al esférico y se perdió la primera.
El asedio del equipo visitante continuó y el ‘Rojo’ no encontró mejor remedio que despejar cuanto balón hubo. Las pocas opciones que hubo para hacer un contragolpe acabaron con un pelotazo o con un pase hacia atrás para controlar la posesión.
En la etapa de complemento, nuevamente el ‘Decano’ se fue con todo a la ofensiva y en una pelota parada pudo abrirse el marcador. A los dos minutos de la segunda etapa, centro de González que encontró a Bianchi en solitario pero, este no le pudo dar colocación al cabezazo.
Atlético Tucumán no renunció jamás a su filosofía de ir al ataque y después de tantas ocasiones generadas, una tenía que llegar. A los 63 minutos, confusión de la zaga que le permitió a Fernando Zampedri conectar de cabeza y mandar el balón directo a las redes.
Los pasajes finales del encuentro no variaron mucho con la excepción de que el ‘Decano’ ya resguardó su ventaja y se defendió bien. Su rival, con un nivel muy pobre y sin ideas para generar peligro. Un escenario que pudo ser una fiesta y que al final tuvo festejos solo en una de las generales.
Fuente: Radio Huancavilca
