Las personas que consumieron antibióticos constantemente entre los 20 y 60 años presentan luego con más frecuencia pólipos, pequeñas lesiones benignas de la pared intestinal que pueden, a largo plazo, convertirse en cáncer.
Según el estudio publicado en la revista médica Gut, la investigación se suma a otras sobre el rol de la flora intestinal en la aparición de cáncer digestivo.
El análisis se concentró en una muestra de 16.600 mujeres estadounidenses mayores de 60 años, que se efectuaron una colonoscopía. A 1.195 les detectaron pólipos o ademona colorrectal.
Los autores del artículo indican que quienes recibieron un tratamiento con antibióticos durante dos meses acumulados entre los 20 y 39 años tenían el 36% de probabilidad de tener pólipos en el colon o el recto.
Entre las mujeres que recibieron antibióticos durante dos meses entre los 40 y 59 años, la frecuencia de pólipos fue de 69%, agregan los autores.
“La relación sería una explicación biológica plausible”, subrayan. Los antibióticos alteran la flora intestinal al disminuir la cantidad y la diversidad de bacterias y reducen la resistencia a las infecciones.
Fuente: El Telégrafo