Empoderamiento, aprendizaje y libertad de expresión son conceptos base para definir un proyecto en red que surge de la sociedad, por la sociedad y para la sociedad, y que hoy celebramos como el Día de Internet.
Para analizar correctamente la importancia de internet es necesario focalizarnos en cuatro áreas: lo social, el sector tecnológico como interpretación de lo económico en general, la necesidad de una administración gubernamental adecuada a la evolución tecnológica y social, y el futuro que se nos acerca: la próxima revolución.
La sociedad conectada
Estamos presenciando una revolución de la comunicación que podemos denominar como el acceso al conocimiento de un conjunto amplio y creciente de la ciudadanía, que permite pronosticar mejoras en la producción y en la administración, así como prever un impacto positivo en la educación, la salud, la investigación, en la vida cotidiana misma, etcétera.
Las tendencias tecnológicas parecen ser inclusivas a la innovación social, por ejemplo, plataformas de comunicación móvil cada vez más potentes e inteligentes, crecimiento exponencial del uso y servicios en la nube e internet de las cosas y sus aplicaciones en casi todas las actividades humanas.
Estas transformaciones obligan a una discusión continua acerca de las políticas educativas y sociales en diversos niveles de análisis.
El sector tecnológico
Con un gran dinamismo, es una actividad sujeta al continuo cambio en las condiciones técnicas innovativas y de contextos políticos y económicos locales e internacionales que obligan a una constante actualización. Es clave para la innovación, la creación de nuevos negocios y la necesidad de transformación o adecuación de muchos de los existentes.
Los atributos requeridos para la empleabilidad sufrirán un cambio inesperado o de alta incertidumbre: disponibilidad de recursos humanos, cambios en el contexto macroeconómico que impactarán sobre los salarios del sector y la cuestión del financiamiento.
Todos los actores deberán prepararse para un cambio y la actitud para comprenderlo y anticiparlo será crítica.
Del gobierno como administrador de redes tecnológicas
Los Estados-gobiernos devienen cada vez más en administradores de la complejidad creciente de redes sociales con alta flexibilidad y capacidad evolutiva.
Cuanto más tecnológicamente evolucionada esté la sociedad, mayor deberá ser su papel de facilitadores de interacciones, interconexiones e interoperabilidad, no sólo entre las instituciones propiamente dichas sino con todo el universo de redes y nodos en la sociedad en sí.
Los servicios requeridos por la sociedad deben sustentarse por sistemas tecnológicos tanto o más avanzados que los que poseen los ciudadanos o al menos proveer servicios con el mismo nivel de eficiencia e interoperabilidad y seguridad que los de estos.
Revolución 4.0
Argentina debe preparase para el advenimiento de un cambio de paradigma en las posibilidades productivas. Este cambio será la cuarta revolución productiva, que generará un nuevo hito en el desarrollo industrial que sin duda marcará importantes cambios políticos, económicos y sociales en los próximos años.
Un cambio en el que debemos entender cómo aprovecharnos de la digitalización para que nos ayude a crecer como país.
Fuente: Infobae
