Nadie estaba contento con el canon digital desde hace meses, y ahora esta polémica tasa se ha modificado con una diferencia fundamental: la compensación a los autores se cargará a los dispositivos.
Eso significa que serán los fabricantes de móviles, CDs o memorias Flash, por ejemplo, los que tendrán que asumir el coste de la copia privada, aunque la pregunta que se hacen todos los usuarios es la misma: ¿acabará recayendo ese impuesto en los usuarios?
¿Quién pagará realmente el canon digital?
La Asociación para el Desarrollo de la Propiedad Intelectual (ADEPI) considera esta reforma una buena noticia y la equiparan al modelo europeo de compensación por copia privada, «que carga la compensación equitativa a los importadores y fabricantes de equipos, aparatos y soportes de reproducción».
Hay también un punto importante en este nuevo canon digital: se van a incluir excepciones para que las empresas y la administración puedan pedir devolución, algo que provocó que lo declararon nulo en primer lugar hace años.
El canon aplicado dependerá por supuesto del tipo de dispositivos y productos: en los smartphones los fabricantes abonarán 1,10 euros, mientras que en una tablet el importe será de 3,15 euros. En España se aplicará el canon digital a los mismos dispositivos que el resto de países de nuestro entorno, pero las cuantías serán más bajas que en esos países, aseguran fuentes oficiales.
Este nuevo modelo hace así responsables a esas entidades del pago de ese canon digital, pero muchos se preguntan si la aplicación de dicha nueva normativa no acabará afectando al precio de todos esos dispositivos y seremos los usuarios finaleslos que acabaremos asumiendo ese coste.
Fuente: xataka
