El Ministerio de Salud Pública (MSP) cuenta con un presupuesto de $ 318,2 millones para la adquisición de medicamentos, dispositivos e insumos, lo que constituye un aumento de 14,5% con relación al monto destinado en 2016.
“El cuadro nacional básico de medicamentos contempla más del 98% de los problemas de salud y del perfil epidemiológico de este país”, comentó la ministra de Salud, Verónica Espinosa, quien recalcó que en la última década hubo un cambio radical para brindar atención integral a las enfermedades raras y catastróficas.
De los más de 700 medicamentos que forman parte del cuadro nacional básico, 116 corresponden a aquellos utilizados en tratamientos de estas patologías. Esta cartera de Estado, cada dos años, con los 18 actores del sistema integral de salud -público y privado- actualiza el cuadro en base a los análisis técnicos.
“Los estudios revelan que son los medicamentos que más tiempo circulan en el mercado los que tienen el mayor perfil de seguridad. Esto no significa que no existan innovaciones y alternativas”.
El cuadro básico de medicinas existe hace tres décadas, pero “fue en los últimos 10 años cuando se dio énfasis a la atención integral de enfermedades catastróficas a nivel de la red pública y complementaria de salud”, insistió la ministra.
La funcionaria descartó los datos difundidos por la asambleísta Blanca Ugarte, quien aseguró que en el país no existe el 11% de los medicamentos que requieren los pacientes con enfermedades catastróficas.
El año pasado el MSP derivó 12.577 pacientes a Solca, entre ellos Gabriela Monar, quien recibió 10 días de radioterapia. Este servicio le representó al MSP $ 2.000, que es parte de los $ 130 millones que anualmente se entrega a la institución por la atención de cáncer. Espinosa agregó que se cubre “medicamentos costosos como los factores de coagulación para los pacientes hemofílicos”.
María Mena, catedrática de la Universidad Central, aclaró que todas las medicinas que pertenecen al cuadro básico demuestran efectividad en el tratamiento de las patologías; mientras que las aún no incluidas no han evidenciado un fundamento científico de efectividad. “El Estado debe ser responsable de garantizar que los pacientes tengan acceso a los medicamentos seguros. Esto se prueba con un estudio”.
Para ella, el galeno que valora la enfermedad debe solicitar a la autoridad sanitaria la disponibilidad de un medicamento nuevo, en caso de que haya alguien con patología única. “El médico debe basarse en la mejor evidencia científica disponible que demuestre que dicha dosis mejora significativamente las condiciones de vida”.
Esta solicitud pasa por análisis de expertos y de instituciones antes de recibir la aprobación.
Mena añadió que cuando un paciente requiere un fármaco de emergencia para vivir e inexistente en el país se lo adquiere de forma inmediata y se justifica ante la Dirección Nacional de Medicamentos.
De su lado, Analía Porrás, jefa de la Unidad de Medicamentos y Técnicas Sanitarias de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), consideró que lo importante no es tener una solución inmediata, sino buscar la mejor alternativa.
La Fundación Ecuatoriana de Esclerosis Múltiple (Fundem) tiene un registro de 200 pacientes con esta patología, de la que aún no se conoce el origen, pero no es genética.
Magdalena Sánchez, directora ejecutiva de Fundem, opinó que el Estado cumple con la entrega de medicamentos de forma oportuna a los pacientes que la padecen. La organización trabaja, junto con el MSP, para la elaboración de guías para el tratamiento e incrementa el portafolio de medicamentos que combaten esta enfermedad. “A nivel mundial hay tratamientos para la esclerosis múltiple que aún no existen en el país. Para que ingresen y lleguen a los hospitales debe demostrarse técnicamente que frena el proceso de esta patología”.
En Guayaquil, Espinosa mantuvo ayer una reunión con los directivos de Solca para “reabrir ese espacio de trabajo conjunto con el MSP y garantizar el tratamiento a los pacientes con cáncer”.
El sistema de derivación se ejecuta cuando el MSP no tiene la capacidad resolutiva. Apuntó que se ha tratado de fortalecer la capacidad en el servicio público porque hay momentos en que la de Solca supera los límites.
Datos
Actualmente 110 medicamentos están en análisis para ser incluidos en la nueva versión del cuadro básico 2018. Cada dos años se actualiza la lista.
Desde 2013 hasta el momento se aprobaron 271 fármacos de enfermedades catastróficas fuera del cuadro básico. El Estado brinda atención integral a los pacientes con estas patologías.
Este año el Estado destinó $ 9 millones para el tratamiento integral del VIH/sida. En los 756 pacientes de hemofilia anualmente se invierten $ 9’751.883.
El país invierte $ 130 millones en derivación de pacientes con enfermedades catastróficas para su atención integral. Las medicinas y los tratamientos que reciben son gratuitos.
Fuente: El Telégrafo