Pablo Vanegas, presidente de la Asociación Hotelera del Azuay, mencionó que el año 2016 fue uno de los más críticos para el sector, por problemas nacionales y locales que afectaron la presencia de turistas en Cuenca.
“En lo que va de los primeros seis meses, se ha registrado tan solo un 30 por ciento de ocupación”, dijo Vanegas.
Para Patricio Miller, presidente de la Cámara de Turismo del Azuay, la crisis aún no está superada, pese a que se ha mejorado ciertos problemas de movilidad. Por ejemplo, los trabajos del tranvía ya no afectan el centro histórico, según su visión.
La percepción de los turistas considera que “es muy sensible por lo que se resisten en visitar la ciudad, a pesar de tener el título de Patrimonio Cultural de al Humanidad.”
Miller agregó que están a la espera del lanzamiento oficial de las ofertas turísticas por parte del Ministerio de Turismo. “Anhelamos que el destino Cuenca sea tomado en cuenta para propuesta en conexiones con otros destinos nacionales”.
Carlos Andrade, presidente de la Asociación de Bares y Restaurantes del Azuay, indicó que “son cientos de negocios cuencanos que aún no logran ver mejorías”.
