El pasado viernes 8 de diciembre el líder de la organización palestina Movimiento de Resistencia Islámica (HAMÁS), Ismael Hanniya, convocó al pueblo palestino a una tercera intifada contra Israel.
Las intifadas han sido los levantamientos del pueblo palestino contra los ataques perpetrados por Israel, la ocupación colonial en Gaza, Cisjordania y Jerusalén, así como la negativa del Estado israelí de reconocer el derecho de autodeterminación de Palestina.
Las acciones de la intifada se enmarcan dentro del contexto de desobediencia civil contra las autoridades israelíes.
Esta es la tercera vez que el pueblo palestino es convocado a levantarse contra el atropello de Israel, en esta ocasión por la decisión del mandatario estadounidense Donald Trump de reconocer a Jerusalén como capital de Israel el pasado 6 de diciembre.
La decisión de Trump fue criticada por la comunidad internacional, debido a que el estatus de Jerusalén aún no se ha resuelto, por lo cual otorgarle la categoría de capital de Israel sería una violación a las resoluciones de la Organización de Naciones Unidas (ONU)y al derecho internacional.
Las protestas por la política adoptada por Trump se han desarrollado masivamente en Cisjordania, en Gaza y en todos los países musulmanes.
La primera intifada se desarrolló hace 30 años, en diciembre 1987 y se extendió hasta 1993, como mecanismo para poner fin a la ocupación israelí en los territorios palestinos.
La lucha nacional palestina agrupó a todos los sectores de la sociedad de manera generalizada, los cuales a través de huelgas, el llamado a la desobediencia civil, el abandono de sus trabajos en Israel, y el boicot a los productos israelíes entre otras cosas, se rebelaron a la opresión ejercida por el gobierno israelí.
El detonante de la rebelión fue el asesinato de cuatro trabajadores palestinos en el campo de refugiados de Yabalia por parte de un camión militar perteneciente a las Fuerzas Armadas israelíes.
Los seis años que duró la intifada, se caracterizaron por la resistencia del pueblo palestino a los intentos del Gobierno israelí de socavar la moral y la las reivindicación de los derechos que el pueblo palestino reclamaba.
El resultado de la organización del pueblo para exigir sus derechos, fueron los Acuerdos de Oslo firmados en 1993, en el cual se establecían las disposiciones mediante las cuales el Gobierno de Israel y la Organización de Liberación de Palestina (OLP) resolverían el conflicto.
La segunda intifada se desarrolló a partir del año 2000, extendiéndose hasta el 2005. Lo que inició el alzamiento de los palestinos, fue la provocación que significaba la visita de Ariel Sharón, primer ministro israelí para la fecha, a la explanada de la Mezquita Al Aqsa, el tercer lugar más importante para la fe islámica.
A esto se sumaba los efectos de la sostenida ocupación de Israel en los territorios palestinos, la hostigamiento a su población, y el rechazo de los palestinos a los Acuerdos de Oslo realizados en 1993.
Durante los cinco años que se mantuvo la rebelión, más de cinco mil palestinos fallecieron.
El conflicto en la región se ha perpetuado debido a la negativa de Israel de reconocer el derecho del pueblo palestino a la autodeterminación y a existir como Estado, al continuo hostigamiento al que son sometidos los habitantes de Gaza y Cisjordania desde la ocupación de sus territorios en 1967, y la violación de sus derechos humanos, a pesar de las resoluciones dispuestas por la Organización de Naciones Unidas para atenuar los efectos del conflicto.
Redacción CiudadColorada.com | Telesur