Desde el norte de Florida pasando por Nueva York y hasta Nueva Inglaterra, millones de personas soportan temperaturas gélidas que llegan a -40°. Gran parte de la costa este de Estados Unidos se despertó ayer a temperaturas extremadamente frías y peligrosas.
A medida que la región se recupera del temporal de viento que desató esta semana fuertes nevadas y fuertes vientos en todo el territorio. Desde el norte de Florida hasta la ciudad de Nueva York y Nueva Inglaterra, millones de personas sufrieron bajas temperaturas durante todo el día.
En algunas partes del norte llegaron a -40° mientras que en el sur bajaron 20 grados al promedio pronosticado para enero. “Puede ser muy peligroso”, alertó Dan Pydynowski, meteorólogo del servicio privado AccuWeather. “Cualquier tipo de piel expuesta se puede congelar en cosa de dos minutos”.
Ayer se realizaban trabajos para quitar la nieve y el hielo de los caminos luego de que una tormenta azotó la región el jueves y el viernes, forzando el cierre de escuelas, la paralización de la actividad en aeropuertos y la suspensión o reducción de servicios de transporte.
La primera tormenta de nieve de la región en 2018 tuvo ráfagas de viento de más de 113 kilómetros por hora, con 56 centímetros de nieve en algunas zonas de Maine y 43 centímetros en partes de Massachusetts, informó el Servicio Meteorológico Nacional.
La tormenta fue alimentada por una rápida caída en la presión barométrica que algunos meteorólogos llaman bombogenesis, que causa fuertes vientos e intensas nevazones. Las condiciones del tiempo han causado la muerte de al menos 19 personas en los últimos días en los estados afectados en el país.
Entre Houston y Boston se está trabajando para llevar a personas sin hogar a refugios. Las autoridades dijeron que tres indigentes murieron en Texas por exposición al frío. En Toronto, la mayor ciudad de Canadá, se buscaban refugios de emergencia para personas sin hogar mientras las temperaturas descendían a mínimos históricos.
Redacción CiudadColorada.com | Telegrafo