El superintendente de Ordenamiento Territorial, Uso y Gestión del Suelo, Fernando Cordero, afirmó que en el Ecuador existen “enormes desequilibrios territoriales” lo que impide el desarrollo, sobre todo, en las localidades más pequeñas.
Aseguró que el municipio más pequeño del país es Pablo Sexto ubicado en la provincia de Morona Santiago y recibe alrededor de 1.371 dólares por habitante por año. En esa localidad viven 1.800 personas por lo que recibe un poco más de 2 millones de dólares que «no les alcanza ni siquiera para hacer una planta de agua potable».
En cambio, el municipio más grande que es el de Guayaquil recibe 64 dólares por habitante al año, pero al tener tres millones de habitantes termina con más de 190 millones de dólares
Es por eso, dijo, en el área rural del país existe más pobreza que en el sector urbano y “diferencias abismales”. En ese sentido, comentó el nivel de pobreza en el área urbana bajó del 77% registrado en 1999 al 54% el año pasado; sin embargo, en el sector rural la pobreza 98% a 89%, en el mismo periodo.
Cordero destacó el funcionamiento de la entidad, desde el 2 de enero de este año, y señaló que el enfoque debe ser coherente con el mandato constitución que dispone una administración descentralizada.
«Hace seis meses la Superintendencia no existía, ahora hemos planteado los Encuentros Territoriales en el país que se realizaron desde el año pasado», anotó.
Al momento, se han desarrollado 16 Encuentros Territoriales entre la Superintendencia y representantes de los gobiernos autónomos descentralizados de Cuenca, Loja, Tena, Riobamba, Quito, Ibarra, Portoviejo y Guayaquil. Con las autoridades se abordaron temas como hábitat seguro y saludable, función social de la propiedad, participación ciudadana y vivienda adecuada y digna.
Cordero hizo un llamado a conocer y poner en práctica la ley de Ordenamiento Territorial, Uso y Gestión del Suelo que, entre otras cosas, garantiza la descentralización. Además, norma la entrega de permisos de construcción con el fin de evitar que se levante edificaciones en zonas de riesgo.
La Intendenta de Ordenamiento Territorial y Uso y Gestión del Suelo, María Augusta Muñoz, indicó que entre las tareas de la Superintendencia está mantener una agenda de trabajo permanente en territorio, no solo con representantes de los GADS sino también con universidades y ministerios.
“Les preocupan a los gobiernos autónomos saber las normas que regulan la gestión del ordenamiento territorial, la planificación urbanística y el uso y gestión del suelo”, manifestó Muñoz.
La matriz de la flamante Superintendencia está en Cuenca y existen oficinas en Quito, Guayaquil, Manta, Ibarra, Tena, Macas y Loja, se estima que cada una tenga 30 funcionarios.
Redacción CiudadColorada.com | Andes