Ecuador ha logrado repatriar 6.445 bienes culturales desde varios países en los últimos ocho años, gracias a la firma de convenios bilaterales bajo el paraguas de la Convención de 1970 firmada en París.
Dicha Convención señala las medidas que deben adoptarse para prohibir e impedir la importación, la exportación y la transferencia de propiedad ilícitas de bienes Culturales y hacer más efectiva esta cooperación internacional.
El 9 de marzo de 2010 el gobierno de Ecuador expidió un Decreto Ejecutivo que dispone la creación de una Comisión Nacional de lucha contra el tráfico ilícito de bienes culturales, y en 2016 se expidió la Ley de Cultura, que se incorpora también el Servicio Nacional de Aduanas.
La Comisión tiene un órgano asesor que es el Comité Técnico Nacional de Lucha contra el Tráfico de Bienes Culturales, que se encarga de generar herramientas que permiten hacer más efectivo el combate contra el tráfico.
Ecuador dio un nuevo paso la semana pasada en este ámbito con la presentación del ‘Manual para la repatriación de bienes culturales patrimoniales a través de valija diplomática’, que establece procedimientos y recomendaciones a las embajadas y consulados en el exterior para gestionar su trabajo en los casos de recuperación y repatriación de los bienes al país.
“Es una herramienta que va a permitir a nuestras misiones diplomáticas y a los funcionarios que trabajan allí tener un manejo adecuado de aquellos bienes que son devueltos o recuperados en el exterior”, señaló a Andes Carlos Espinosa, presidente del Comité Técnico.
El manual contiene un resumen de los principales instrumentos jurídicos nacionales e internacionales relacionados con la repatriación de bienes culturales patrimoniales, así como los procedimientos para manipular los objetos en los procesos de transporte y embalaje e indica los principios de la preservación y conservación.
La idea es que se puedan transportar mediante la valija diplomática piezas que no requieran una logística de transporte especial.
“Eventualmente los bienes que se recuperan pueden ser colecciones bastas de más de 500 piezas pero también puede ser una recuperación de piezas más bajo que no necesitan un proceso para traerlos con una empresa de transporte, sino que con este manual se permite hacer un embalaje adecuado para que nuestras misiones diplomáticas los repatrien a través de la valija diplomática”, aclaró Espinosa.
Según cifras del 2012, el tráfico ilegal de bienes culturales mueve alrededor de 60 millones de dólares a nivel mundial, superando el tráfico de armas y solo por debajo del tráfico de estupefacientes.
Redacción CiudadColorada.com | Agencia Andes
