Un fuerte terremoto de magnitud 6.1 en la región de la populosa ciudad de Osaka en Japón dejó al menos tres muertos y 230 heridos, informaron este lunes 18 de junio del 2018 medios japoneses.


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Un fuerte terremoto de magnitud 6.1 en la región de la populosa ciudad de Osaka en Japón dejó al menos tres muertos y 230 heridos, informaron este lunes 18 de junio del 2018 medios japoneses.

Según las autoridades, una niña de nueve años murió de camino a la escuela cuando se vino abajo la pared exterior de una piscina, mientras que un adulto mayor murió sepultado por una pared y otro cuando se le cayó encima una estantería.

Los medios informaron de decenas de incendios, en varias tiendas las mercancías cayeron al piso desde los estantes y hubo muchas demoras en los trenes de la mañana.

El sismo se registró a una profundidad de alrededor de 13 kilómetros en el norte de la prefectura de Osaka, por lo cual la sacudida en la superficie fue bastante intensa, informaron los medios. «Vi moverse el techo y el suelo y casi no podía tenerme en pie», relató un viajero matinal en la estación de Osaka.

«Fue horrible». El terremoto fue el de mayor intensidad sísmica desde el inicio de los registros en 1923, informó el Servicio Nacional de Meteorología en Tokio. No hubo alerta de tsunami ni tampoco de peligro en el funcionamiento de las centrales nucleares de la región.

Una cañería se rompió y hubo una inundación en una zona, por la que tuvieron que varias fábricas de Toyota, Honda y Daihatsu interrumpir la producción.

Los expertos llevan tiempo advirtiendo de posibles sismos fuertes en la región por la presencia de varias fallas tectónicas. Una de las fallas pasa justo por debajo de la ciudad de Osaka y está considerada especialmente peligrosa porque lleva más de 10 000 años inactiva.

En 1995, la región se vio sacudida por un terremoto de 7.3 en el que murieron más de 6 434 personas. El Servicio Nacional de Meteorología alertó de que puede haber réplicas, pero rechazó los temores de que el sismo pueda desatar un enorme terremoto y tsunami como ocurrió en 2011 en el noreste del país, cuando una ola gigantesca mató a 18 500 personas y provocó una catástrofe nuclerar en la central de Fukushima.

Japón es uno de los países con mayor actividad sísmica del mundo. El fin de semana anterior, dos sismos de menor magnitud sacudieron las prefecturas de Gunma y Chiba, vecinas a Tokio.

El sismo de hoy lunes dejó sin electricidad a más de 170 000 hogares en Osaka y la prefectura vecina de Hyogo y también se interrumpió el abastecimiento de gas. Algunas personas se quedaron atrapadas en los ascensores yendo al trabajo.

 


Redacción CiudadColorada.com | El Comercio







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