Tras la intervención de la vicepresidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE), Ana Marcela Paredes, el pasado 10 de julio, en el Consejo de Participación Ciudadana y Control Social Transitorio (CPCCS-T) donde afirmó que el CNE no era transparente y que su modelo era cercano a la tiranía, la funcionaria considera que esto sirvió para desvirtuar las observaciones del informe de evaluación.
«Ser independiente provocó represalias, no coincido con 4 miembros del CNE», mencionó.
Paredes afirmó que se siente como una voz disonante al interior del organismo. También, Paredes, pide que se realice una evaluación por separado a la Contraloría y al Consejo de Participación.
“No coincido con los cuatro miembros del CNE, no quiero cumplir el papel de florero, de refrendar temas en los que no coincido en los más mínimo.
Creo que el modelo del CNE parte de una lógica autoritaria en donde todo se centraliza en la autoridad nominadora”.
“Yo puedo decir que mi voz ha sido independiente, lo que provocó represalias bastante burdas por no coincidir con el resto de consejeros”.
En la entrevista realizada por el diario “El Telégrafo”, Paredes comentó que “tres colaboradores de mi despacho fueron despedidos por parte de la autoridad nominadora, en este caso la Presidenta (Nubia Villacís), pues es la cabeza de la función que usualmente actúa así.
Pasó en la anterior administración y pasa ahora, solo por tener una voz diferente”.
Ante la posibilidad de que el CNE pueda ser cesado Paredes dijo que tiene que hacerse un análisis puntual de cada uno, “yo no me siento en el mismo saco.
Esperaremos el veredicto final”. También insistió que es necesario que la Contraloría analice los recursos asignados al CNE para los procesos electorales efectuados.
Redacción CiudadColorada.com | Ecuador Inmediato