El último golpe de los reguladores europeos al dominio del gigante tecnológico estadounidense Google podría abrir nuevas oportunidades para buscadores y navegadores rivales, si los fabricantes de dispositivos móviles deciden aprovechar al máximo la apertura.
La Comisión Europea impuso el miércoles una multa récord de 5.000 millones de dólares a Google por obligar a los fabricantes de celulares que utilizan el sistema operativo Android a instalar sus aplicaciones de búsqueda y navegador. Además dio un plazo de 90 días para que rectifique el problema o podría enfrentar más sanciones.
Una solución podría ser la desagregación de sus aplicaciones básicas _ Search, Chrome y Play Store _ de las otras ocho que incluye con Android. La empresa podría optar también por revertir su práctica de no permitir que fabricantes de celulares Android vendan dispositivos con versiones alteradas del sistema operativo, como el Fire OS de Amazon.
La comisaria de Competencia de la UE, Margrethe Vestager, dijo que las preocupaciones sobre las restricciones a la competencia “no eran solo una posibilidad remota en los libros de teoría”. Dijo que Amazon intentó patentar su Fire OS basado en Android en 2012, pero que los contratos con Google se lo impidieron.
Google dijo de inmediato que apelará el fallo, alegando que su sistema operativo libre derivó en celulares más baratos y creo competencia con su principal rival, Apple.
Android ha “creado más oportunidades para todo el mundo, no menos”, tuiteó el director ejecutivo de Google, Sundar Pichai.
Mozilla Foundation, el grupo sin ánimo de lucro detrás del buscador Firefox Focus, dijo que el fallo les da la oportunidad de desplazar a Chrome como el buscador por defecto o preinstalado en algunos terminales y ya mantuvo conversaciones al respecto con fabricantes desde Huawei a Samsung.
El fallo crea “una gran oportunidad”, explicó Denelle Dixon, directora de operaciones de Mozilla, el miércoles.
Pero también es posible que no haya demasiados cambios. Google Search, Chrome y Play Store son muy populares entre los consumidores y desarrolladores. Los fabricantes podrían elegirlos pese a la desagregación.
“Es posible que los fabricantes de celulares no se aprovechen la nueva libertad que tienen”, señaló Thomas Vinje, abogado principal de FairSearch, un grupo de cabildeo con sede en Bruselas respaldado por Oracle, TripAdvisor y otros, que fue el principal denunciante en el caso. “Al menos abre la posibilidad”.
La sanción, que culmina una investigación de tres años, es la mayor impuesta nunca por la UE a una empresa por un comportamiento anticompetitivo.
Pero no parece que la mulita vaya a paralizar a la firma. La matriz de Google, Alphabet, ganó 9.400 millones de dólares en el primer trimestre del año y tiene más de 100.000 millones de dólares en reservas en efectivo.
Tanto Amazon como Samsung, fabricante de la popular línea de celulares Galaxy, rechazaron pronunciarse sobre el fallo.