En cinco paredes de Santo Domingo se hizo un tributo a la nacionalidad Tsáchila. Quince artistas nacionales e internacionales se encargaron de dar color a las paredes, ubicadas en la zona céntrica de la ciudad. Ahí plasmaron plantas de achiote, que son muy importantes para la etnia.


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En cinco paredes de Santo Domingo se hizo un tributo a la nacionalidad Tsáchila. Quince artistas nacionales e internacionales se encargaron de dar color a las paredes, ubicadas en la zona céntrica de la ciudad. Ahí plasmaron plantas de achiote, que son muy importantes para la etnia.

La guía nativa Miriam Calazacón afirma que el achiote contrarrestó los síntomas de la fiebre amarilla, que estaba acabando con la nacionalidad hace más de 300 años.

En la avenida Río Toachi, la artista Mayra Cadena, conocida como Azuliz, realizó otro mural en el que dibujó a una mujer tsáchila con cintas de colores en el cabello negro, pulseras y las líneas características de los tsáchilas en el cuerpo, con las que cuentan la historia y costumbres de su etnia. 

La mujer tsáchila aparece en el mural con las manos puestas alrededor de los ojos. Para Cadena es una observación para que los que miren el mural y empiecen a ver el mundo de colores y a apreciar el arte en Santo Domingo. 

Al lado de ese mural hay tres más. A un costado está el de un niño tsáchila con un tigrillo, que es uno de los animales icónicos de la nacionalidad y que está en peligro de extinción en las siete comunas.

Mientras que en el centro se pintó a dos niños shuar con un mono y un pájaro, en la parte de atrás se puede observar la selva del Oriente. Con este mural se muestra la diversidad étnica que hay en Santo Domingo de los Tsáchilas. 

Según el Municipio, varios jóvenes artistas, como Danny Bravo, presentaron una propuesta para que se les gestionaran espacios y poder pintar los murales. Así que se buscaron vías que sean transitadas y por las que pasan turistas.

Luego de tener el espacio, los jóvenes lanzaron una convocatoria para que los artistas del país postularan y participaran del festival Santo Color 2018.

Entre los artistas santodomingueños que participaron se encuentran Huek; Maikol y Azuliz. Mientras que Carola Mancilla representó a Chile y Pietro Zaffi, a Italia. También hubo artistas nacionales como Pincel de Cristo, de Portoviejo, Manabí, entre otros. 

No todos los murales son dibujos de tsáchilas, también hay grafitis amarillos, rojos, naranjas, azules y verdes. 

La idea fue mostrar, a través de dibujos, la diversidad cultural y el creciente desarrollo artístico que tiene la provincia. Los jóvenes planean realizar el festival cada año.

La convocatoria será a nivel internacional y se realizará en julio, por las fiestas de cantonización de Santo Domingo.

 


Redacción CiudadColorada con información de El Comercio







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