Una cámara del sistema de seguridad del ECU911 registró incandescencia cerca del cráter del volcán Sangay, ubicado en la provincia de Morona Santiago, en la Amazonía.
Este fue uno de los indicios de actividad superficial en este volcán que detalló el Instituto Geofísico de la Escuela Politécnica Nacional este martes 14 de agosto del 2018. A través de un boletín, la entidad informó sobre el inicio de una nueva fase eruptiva que empezó el 8 de agosto de este año.
Según el Geofísico, hay emisiones de ceniza poco energéticas que han alcanzado los 2,3 kilómetros de altura. Este material, indicó el Geofísico, podría dirigirse al occidente del volcán y caer en zonas deshabitadas o pasar por rutas aéreas; todo depende de la dirección del viento.
La primera nube de ceniza fue detectada el 8 de agosto, y una segunda emisión se divisó el 11 de este mismo mes.
A través de sensores térmicos satelitales se detectó una anomalía de calor en el Sangay, este martes 14 de agosto del 2018. El Geofísico no ha detectado actividad sísmica debido a problemas técnicos.
El volcán Sangay, de 5 230 metros de altura, retomó esta una fase eruptiva tras nueve meses de inactividad . El Geofísico recordó que en los últimos 14 años las columnas de ceniza que han salido de esta elevación no han superado los 3 500 metros de altura sobre el cráter.
Redacción CiudadColorada con información de El Comercio