Los palestinos han denunciado de nuevo a Israel ante la Corte Penal Internacional después de que Estados Unidos dijera que recurriría a cualquier medio para proteger a sus aliados frente acciones de ese tipo en el tribunal para crímenes de guerra, dijo el martes un alto funcionario.
La medida fue anunciada un día después de que Estados Unidos cerrara la embajada palestina en Washington debido a la renuencia de las autoridades palestinas a iniciar conversaciones de paz con Israel.
El asesor de Seguridad Nacional, John Bolton, también arremetió contra los palestinos por intentar que Israel sea enjuiciado en la CPI, censuró la legitimidad de la corte y amenazó que Washington adoptaría sanciones si esa instancia actuaba contra Israel y otras partes.
Sin embargo, en una conferencia de prensa en Ramala, Saeb Erekat reiteró que los palestinos solicitaron a la CPI que investigue la demolición que Israel ha programado de la aldea palestina beduina de Khan al Ahmar, en Cisjordania. También señaló que los palestinos tienen previsto integrarse a otros organismos internacionales.
Erekat dijo que los palestinos han solicitado a la fiscal general de la CPI que se reúna con representantes de la aldea e incluya las acciones de Israel como parte de la investigación sobre posibles crímenes de guerra cometidos por el estado israelí.
“Las amenazas de Estados Unidos contra la CPI constituyen un golpe de estado contra las normas del sistema internacional”, apuntó. “El gobierno de Trump pretende el desmantelamiento del orden internacional para garantizar que pueda estar encima de las leyes y escapar a la rendición de cuentas”.
Israel ha criticado desde hace mucho tiempo los intentos de los palestinos de globalizar su conflicto cuando presentan ante organismos externos lo que el estado judío describe como reclamos falsos. Israel afirma que la CPI carece de jurisdicción porque el país no es miembro de la corte.
El gobierno del presidente Donald Trump ha intensificado en forma considerable su discurso al amenazar con sanciones si la corte emprende investigaciones contra Estados Unidos, Israel u otros aliados. Bolton dijo que la CPI “ya está muerta” para Estados Unidos.
“Estados Unidos apoya un proceso de paz directo y firme, y no permitiremos que la CPI, ni ninguna otra organización, restrinja el derecho de Israel a defenderse”, afirmó Bolton ante The Federalist Society (La Sociedad Federalista), un centro de estudios conservador con sede en Washington.