La canciller germana, Angela Merkel, no volverá a presentarse a la reelección en 2021 y tampoco aspirará a ningún otro cargo político, según ha anunciado este lunes.
En rueda de prensa en Berlín, la veterana política ha confirmado la información trascendida en las últimas horas acerca de su renuncia al liderazgo de la Unión Demócrata Cristiana.
«Durante el próximo congreso de la UDC, en diciembre, no optaré a la presidencia del partido», ha confirmado Merkel.
Según la agencia AFP, la canciller ha añadido que no designará a su propio sucesor al frente del partido.
«Este cuarto mandato como canciller alemana es el último. En las elecciones federales de 2021 no me presentaré ni como candidata para ser canciller ni como candidata para el Bundestag, ni aspiraré a ningún otro cargo político», ha subrayado.
Esta noticia se conoció un día después de las elecciones al Parlamento regional en el estado federado de Hesse, donde la formación de Merkel sufrió una pérdida significativa de votos.
«La UDC no ha conseguido convencer a los electores», ha constatado Merkel, que ha estado a la cabeza de la formación conservadora durante 18 años.
La UDC recibió el 27% de los votos, lo que equivale a un retroceso del 11,3%, en comparación con las elecciones de 2013. A pesar de mostrar un resultado obviamente menor, el partido de la canciller logró la mayoría de los votos.
Según sugiere el medio alemán Der Spiegel, las posibles candidaturas para reemplazar a Merkel como líder de la UDC podrían ser la secretaria general del partido, Annegret Kramp-Karrenbauer, el ministro de Salud, Jens Spahn, o el ministro presidente del estado de Renania del Norte-Westfalia, Armin Laschet.
Al tiempo que la UDC está experimentado una caída de apoyo, la derechista Alternativa para Alemania ha mostrado una dinámica opuesta, al conseguir el 12 % de los votos en las elecciones en Hesse y ahora contando con escaños en todos los estados federales.
En declaraciones a RT tras los comicios en Hesse, el analista político Steven Meissner ha afirmado que Merkel «se está volviendo cada vez más débil y menos popular».
El manejo del flujo de inmigrantes en 2015 ha sido el factor más negativo para la popularidad de la veterana política. Una encuesta de julio pasado revelaba que solo uno de cada cinco alemanes estaba contento con su desempeño.
Merkel, de 64 años, ha liderado el partido desde el año 2000 y ha sido canciller desde 2005.
Con información de RT
