El Senado colombiano despojó de su inmunidad a un magistrado de la Corte Suprema por supuestamente integrar una red de corrupción en el Poder Judicial.
El juez Gustavo Malo, que fue suspendido por el máximo tribunal más de seis meses atrás mientras el Congreso decidía si lo investigaba, será acusado ahora de los delitos de cohecho, concierto para delinquir, prevaricato y utilización de asunto sometido a secreto.
Malo está sospechado de haber recibido presuntamente más de 800.000 dólares para favorecer a varios congresistas que eran investigados por corrupción.
Esta es la primera vez que un magistrado activo es apartado de sus funciones. De ser hallado culpable en el juicio que llevará adelante la propia Corte Suprema, Malo podría recibir una pena de entre 10 y 20 años de prisión.
El diputado Edward Rodríguez dijo a The Associated Press que desde agosto “se realizaron 173 pruebas testimoniales y posteriormente se concluyó que al interior de la Corte Suprema existía una empresa criminal que se dedicaba a dilatar procesos y en ese orden de ideas hacía parte el magistrado Malo”.
Agregó que “por ahora quedó apartado del cargo y se iniciará el juicio penal”. Explicó que le toca a la Corte Suprema decidir si libra una orden de captura contra malo, “pero en este momento está libre”.
Durante ese periodo Malo estuvo ausente con licencia médica por un dolor de rodilla, una complicación de una cirugía de una hernia y depresión. También gozó de una licencia de dos meses no remunerada. Malo cobraba un salario aproximado de 9.500 dólares mensuales.
La resolución del Senado fue votada la noche del jueves.
Según el dictamen de esa cámara Malo se alió con funcionarios y particulares que tenían procesos en curso en la Corte Suprema para “conseguir decisiones contrarias al derecho a cambio de coimas y dádivas”.