El ex-presidente de Ecuador Rafael Correa informó que Facebook «decidió rechazar definitivamente» la apelación para recuperar su página verificada, en la que tenía más de 1,5 millones de seguidores.
«No especificaron las razones y nunca hicieron ninguna advertencia de incumplimiento de las normas comunitarias. Simplemente la sacaron del aire», dijo el ex-mandatario sobre la negativa de la empresa de Mark Zuckerberg.
En un escrito en Instagram, Correa precisó que, luego de casi dos meses de insistencia a la red social, finalmente respondieron: «los técnicos se pusieron de acuerdo decidiendo no activarla nuevamente».
La página verificada de Rafael Correa fue cerrada el pasado 11 de abril, el mismo día que Lenín Moreno, decidió retirar el asilo diplomático a Julian Assange.
En su texto, Rafael Correa menciona que «la decisión de eliminar la página jamás fue técnica por supuestos incumplimientos a las normas comunitarias, fue política».
El ex-mandatario agregó que la persona de Facebook encargada de la Región Andina, Diego Bassante, quien «más de una vez había publicado contenidos» en su contra, «fue juez y parte en esta decisión ‘técnica’ de suspender la página».
De igual forma, recodó que Bassante, hace unas semanas, «estuvo en el despacho del presidente Moreno, quien fue la persona que decidió que la fuerza pública británica violara toda soberanía y entrara a la Embajada de Ecuador en Londres para extraer a Julian Assange».
Ese encuentro fue publicado por el propio mandatario en su cuenta en Twitter.
Nueva página bloqueada
Pese a ello, el ex-mandatario abrió este jueves una nueva página en la red social Facebook, «por pedido de miles de personas»; pero esta también fue cancelada este viernes.
«¡No lo puedo creer! ¡Ya es descarado!», dijo el ex-mandatario y consultó si «algún abogado sabe qué se puede hacer en estos casos de abierta censura».
En esa nueva página ya sumaba más de 40.000 seguidores, y había señalado que ahí continuaría «denunciando la persecución política, la traición, el entreguismo, los abusos y la corrupción» en los que presuntamente está involucrado el actual mandatario de Ecuador.
«Y esta es la gente que nos habla de ‘libertad de expresión'», se quejó el mandatario tras el nuevo bloqueo, y añadió: «no solo me roban a mí el derecho a expresarme. Le roban a millón y medio de personas su derecho a seguirme».
