El presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, declaró el domingo el estado de excepción en todo el país, como una de las acciones para atender zonas afectadas por el sismo de magnitud 6.5 ocurrido el sábado, con epicentro en la provincia del Guayas.
«Vamos a declarar el estado de excepción, sin restricción de derechos, a nivel nacional, a fin de facilitar y acelerar la contratación pública de las estructuras afectadas», dijo el jefe de Estado ecuatoriano.
En el mensaje al pueblo ecuatoriano, el presidente Lasso señaló que han creado un bono para el alquiler de viviendas, y que adquirirán al sector privado casas ya construidas para repartirlas entre las personas que perdieron sus hogares.
También dijo que gestionarán fondos de emergencia de los organismos multilaterales para disponer de recursos necesarios para atender a los afectados por el sismo.
El mandatario ecuatoriano recorrió el fin de semana las zonas más afectadas, como las provincias de El Oro, Azuay y Guayas, así como Santo Domingo de los Tsachilas.
El terremoto que afectó la zona fronteriza entre Ecuador y Perú dejó, según las cifras oficiales hasta el momento, 14 personas fallecidas, aunque el presidente Guillermo Lasso mencionó que el número de muertos había ascendido a 16 durante una conferencia en la ciudad de Cuenca, en la provincia de Azuay.
De acuerdo con el último reporte de la Dirección de Monitoreo de Eventos Adversos existen 446 heridos, 180 viviendas afectadas, 84 destruidas en su totalidad, 80 unidades educativas dañadas y 33 centros de salud.
Ecuador se encuentra en el Cinturón o Anillo de Fuego del Pacífico, que concentra algunas de las zonas sísmicas más importantes del mundo.