Los transportistas solicitan a las autoridades subir el valor del pasaje de 0,30 a 0,40 dólares, pero la alcaldía guayaquileña se niega a acceder a ese pedido, pues plantea que subir el precio afectaría la economía de la mayoría de los ciudadanos que usan el sistema de transporte público. Asimismo, advirtieron que la interrupción de dicho servicio constituye un delito penal.
La Federación de Transportadores Urbanos de Guayas, provincia del suroeste de Ecuador, suspenderá el servicio en Guayaquil, ciudad más poblada del país, a partir de este miércoles.
El presidente del gremio, Christian Sarmiento, expresó en rueda de prensa, este 21 de marzo, que lamentan una vez más llegar a esta situación, pero es la desesperación del sector transportista por no poder dar un buen servicio. Además, agregó que necesitan hacer arreglos y pagar deudas.
De esta forma, estos trabajadores se suman a los de Ambato, ciudad de la región interandina del país, donde la población está hace nueve días sin ómnibus para trasladarse.
Este sector plantea que las cooperativas están al borde de la quiebra por falta de recursos para cubrir los gastos del combustible y denunciaron que los 0,30 centavos que perciben por pasajero no cubren sus erogaciones.
Mientras que los usuarios del transporte público se oponen al alza en el precio del pasaje, pues se quejan de la mala calidad del servicio debido a que los conductores irrespetan los paraderos y cometen excesos de velocidad.