Los estragos de la estación invernal se sienten esta vez en el cantón Portoviejo, capital de la provincia de Manabí, donde este jueves 8 de junio en la noche el sistema de alerta temprana (SAT) detectó una creciente en la cuenca del río Chico.


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Los estragos de la estación invernal se sienten esta vez en el cantón Portoviejo, capital de la provincia de Manabí, donde este jueves 8 de junio en la noche el sistema de alerta temprana (SAT) detectó una creciente en la cuenca del río Chico.

De ahí que el Municipio pidió a la ciudadanía de los sectores bajos de las parroquias San Plácido, Alhajuela, Calderón y Riochico poner a buen recaudo sus enseres y demás pertenencias ante un posible desbordamiento.

La Alcaldía de Portoviejo mantiene activados sus equipos de respuesta y medidas de prevención, indicó el cabildo a través de su cuenta en Facebook.

En Flavio Alfaro las lluvias registradas durante esta semana provocaron inundaciones en ciudadelas y el sector céntrico de esta localidad, así como también en la zona rural, en sitios como Zapallito y Pozones, la noche de este jueves 8.

Personal del Cuerpo de Bomberos evacuó a familias de varios sectores inundados.

El miércoles anterior en este cantón un hombre de alrededor de 80 años que se dirigía al poblado Las Mercedes desapareció luego de que un deslave se lo llevó. Él se había bajado de su vehículo a retirar obstáculos en el camino cuando se produjo el deslizamiento.

El cantón Chone también sufrió inundaciones, al igual que El Carmen.

Mientras, en Esmeraldas, provincia golpeada por las lluvias durante el fin de semana, las precipitaciones han dado tregua esta semana tras el desbordamiento de seis ríos que inundaron localidades como Esmeraldas, Atacames, Muisne, Quinindé, entre otras.

Casa por casa se levantan fichas de las personas damnificadas por el desbordamiento del río Teaone en Esmeraldas.

Hasta el miércoles, 7 de junio, la Secretaría de Gestión de Riesgos contabilizó 15.077 personas que corresponden a 3.741 familias, y 3.741 viviendas con daños. La mayor parte de la población afectada está en Esmeraldas y Atacames.








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